domingo, 9 de diciembre de 2012

12.525510204082%

Ésa es la cifra del mundo que conozco. No está nada mal, lo admito pero quiero más. Viajar es lo más importante a lo que nos podemos dedicar. Viajamos todos los días, de la cama al baño, del baño al trabajo, en metro, coche o bus, mecánicamente, andando. 

¿Qué me queda por conocer?. Debo ir a los verdes valles de Nueva Zelanda, conocer el Kilimanjaro, aún debo recorrer los helados paisajes de Argentina y Chile. Andar entre volcanes en Islandia, todavía debo dirigir mis pasos a Chicago, y repetir Roma, Sri Lanka, Portugal o Nueva york. Todavía no he conocido las bahías de Vietnam ni he mascado hoja de coca al llegar a La Paz. Aún no fui a Cuba ni me bañé entre tiburones en Tahití ni he vuelto una vez más a París este año, como me prometí. 

Admiro a los nómadas. ¿Cuándo fue que nos hicimos sedentarios?. Supongo que por el hambre. Supongo que sacrificamos curiosidad por comodidad, el tener nuevas y fascinantes experiencias a cambio de no sentir más frío pero a mi me mata ese 87,474489795918% que me falta por descubrir. Debo aumentar el ritmo, en los próximos 36 años no puedo limitarme a un escuálido 12,52%. 

Al doblar la esquina de los 40 debo haber subido al 20%, aún en los próximos diez años, debo haber conocido Japón, Normandía y Brasil. Y con ello, haber completado esos libros que me quedan por escribir, esos hijos que aún no tuve, encontrar esos amigos que no perdí y levantar ese negocio que emprendí. Y con toda esta montaña de tareas pendientes que me quedan, me voy dando cuenta que no somos tan sedentarios como nos pensamos, que aún estamos en marcha y ay de aquél que no lo esté, todo se mueve. Resulta que no es verdad que hayamos dejado de ser civilizaciones nómadas, a pesar de los hijos, el frío, las cosechas o el hambre o, precisamente por todo ello.

Conozco un 12,525510204082% de mundo sí y también 13 años de colegio, conozco médicos, oposiciones y películas, canciones y desgracias. He visto personas, olores y colores, parques y conflictos. ¿Aún te piensas nómada?. Todo es un viaje, así que ya te puede ir gustando viajar, feliz semana.

2 comentarios:

Fernando López dijo...

El viaje empieza, pero nunca acaba. No se puede medir.
un abrazo

Pedja dijo...

Bueno de eso sabes tu algo y con tu blog espero que sí que seas capaz de medir algo del viaje, gracias amigo, un abrazo.